Autoridades académicas, colectivos feministas y gremios estudiantiles buscan poner en foco y frenar prácticas sexistas dentro de la universidad. Es hora de que sepas que no estás sola, no te calles; empodérate.
Por: Zoila Antonio Benito
Portada: Jamilie Cubas
En el ranking de las ciudades más inseguras, machistas y misóginas del mundo, Lima aparece en los primeros lugares. La ciudad que nos acoge, nos amenaza al mismo tiempo. Las universidades no están a salvo de este clima de incertidumbre. Una práctica que se torna cada vez más explícita, sobre todo a raíz del apogeo de las redes sociales, es el acoso y hostigamiento sexual. Ese asedio que vulnera la privacidad ajena y que se expresa en mensajes sexistas o en acciones de carácter invasivo e intimidatorio, no debe ser tolerado por ninguna alumna, docente o trabajadora. En la PUCP se ha creado una instancia para recibir denuncias o reportes sobre estas conductas. Aquí te indicamos qué hacer y cómo reaccionar frente a la presencia amenazante de un acosador.
1. ¿Dónde denunciar casos de acoso y hostigamiento sexual?
-La Comisión Especial para la Intervención frente al Hostigamiento Sexual recibe, evalúa y toma acciones contra los responsables de estos actos cuando se registran dentro de la universidad o en las redes sociales y espacios virtuales que vinculan a la comunidad PUCP. La comisión está conformada por Juan Carlos Callirgos, profesor de la Facultad de Ciencias Sociales; Marisol Fernández, profesora de la Facultad de Derecho y Valeria Bartra, representante estudiantil ante la Asamblea Universitaria (REA) y alumna de comunicaciones. Las víctimas pueden enviar sus denuncias y solicitar una cita escribiendo a: comision-hostigamiento@pucp.pe.
2. ¿A cuántas alumnas afectaría el acoso sexual?
-Es difícil dar una respuesta certera dado que muchas veces la víctima no se atreve a denunciar. Un dato importante, sin embargo, aparece en el ‘Reglamento para la prevención e intervención en los casos de hostigamiento sexual aplicable a estudiantes y docentes de la PUCP’. Este marco normativo revela: “Hay evidencia para afirmar que el hostigamiento sexual tiene una importante prevalencia en las instituciones de educación superior. Un estudio del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (…) demuestra que si bien esta problemática es poco visibilizada y denunciada, la prevalencia podría llegar al 30% de la población estudiantil universitaria”. El reglamento está vigente desde marzo de 2016 y precisa las medidas de prevención, las medidas cautelares y el procedimiento disciplinario por el que pasa una denuncia una vez formulada. Puedes consultar su contenido aquí: https://departamento.pucp.edu.pe/ciencias-gestion/wp-content/uploads/2015/06/RR-0185-2016-1.pdf
3. ¿Existe otras instancias que reciban denuncias por acoso?
-Además de dirigirte a la comisión, puedes escribir una carta de denuncia dirigida al decano de la facultad donde está matriculado el alumno agresor. Si quien acosa es un docente, la carta debe ser enviada al jefe del departamento académico al que pertenece. Muchas de las denuncias llegan primero a la Defensoría Universitaria, que también interviene e investiga, y luego son derivadas a la comisión. “Un dato adicional, puedes buscar al secretario de defensa de tu centro federado; él nos trasladará la denuncia”, precisa Valeria Bartra.
4. ¿Y qué pasa con el alumno o docente acosador?
-Valeria también precisa el procedimiento que aplica la comisión ante una denuncia: “Nosotros le pedimos los descargos al denunciado. Se le abre un proceso, se presentan los testimonios y las pruebas. Después hacemos una investigación propia y esta deriva en una resolución en la que ponemos todos los hechos y damos como fundada o infundada la denuncia. Si es fundada emitimos una sanción contra el denunciado, la sanción puede ser el retiro temporal, pero si el caso es grave o reiterativo cabe la posibilidad de solicitar la expulsión del acosador”.
5. ¿Cuándo se creó esta comisión antiacoso en la PUCP?
-Fue creada en marzo de 2016, después de conocerse un informe de la Defensoría Universitaria. Este mostraba que solo hubo una denuncia por hostigamiento sexual entre 2014 y 2015. Tres años antes, en 2012, una encuesta preguntó a los universitarios peruanos si compartían la frase: ‘La mujer es acosada porque ella lo provoca’; el 88% respondió afirmativamente. Cuando se relacionó ambos datos, o sea, la mayoría de los alumnos culpaban a la mujer de ser acosada y en la PUCP solo se había presentado una denuncia por acoso sexual en 24 meses, parecía evidente que algo grave estaba pasando y nadie se percataba de su dimensión. Nos referimos a una práctica que al estar ‘naturalizada’ era hasta entonces ‘invisible’.
6. ¿Qué pasa si quiero hacer una denuncia contra un empleado de la universidad?
-Valeria Bartra lo explica así: “El reglamento contra el acoso y hostigamiento no contempla a los administrativos y tampoco a los trabajadores con régimen de tercerización laboral. Hasta hace algunos años ellos no eran considerados parte de la comunidad universitaria. Estamos gestionando un cambio en el reglamento para que sean incluidos. Sin bien los tercerizados (como el personal de Eulen o Liderman), no tienen un contrato laboral directo con la universidad, también están regidos por las normas de conducta de sus propias empresas. Podemos encontrar los medios para sancionarlos y alejarlos del campus si se comprueba conductas indebidas. Nadie puede creerse al margen de la ley”.
7. ¿Y qué hacen los grupos feministas en la universidad?
Colectiva es el nombre de un grupo de estudiantes unidas contra la violencia de género. Isabel Ángulo, estudiante de la Facultad de Arte y Diseño, explica cuál es el propósito de su organización: “Estamos atentas a las prácticas de acoso que se dan dentro de la universidad, ya sea por redes sociales o de forma directa. Pronto presentaremos ‘Violencia virtual, violencia real’, un proyecto que busca sensibilizar a la población estudiantil de Estudios Generales Letras. Queremos que las y los estudiantes no solo tomen conciencia de la gravedad de estas prácticas, nuestro objetivo es que se comprometan y se reconozcan como agentes de cambio. Queremos empoderar a las mujeres. Deben entender que si son agredidas o acosadas, no pueden quedarse calladas. No están solas”.
°Colectiva tiene un fanpage en Facebook que además de orientar también recibe consultas y denuncias. “Nosotras somos mediadoras. Nos han escrito chicas, nos han mandado fotos, preguntan qué pueden hacer. Les hemos explicado cuáles son las instancias a las que deben acudir. Queremos ser un puente entre la población estudiantil vulnerada y las autoridades que deben proteger sus derechos”.
°Manada Feminista es otra agrupación estudiantil que también acompaña a los denunciantes. Andrea Bonilla, estudiante de Estudios Generales Letras y una de sus integrantes, explica: “Lo que hacemos es acompañar a la alumna en el proceso de denuncia. La ayudamos; queremos que no tenga miedo a denunciar, que se pronuncie ante casos de violencia de los cuales es testigo. Hemos creado una plataforma de denuncias por Facebook que responde a la consulta de muchas chicas que nos escribían y nos contaban sus casos”.
8. ¿También podemos recurrir a los gremios de estudiantes?
Los centros federados de tres facultades consultadas (Comunicación, Letras y Ciencias Humanas y Estudios Generales Letras) incluyen el tema del acoso y hostigamiento sexual en sus agendas de trabajo.
°Alonso Escobar, secretario de derechos universitarios del CF Comunica, señala: “El ciclo pasado recibimos tres denuncias de acoso. Las derivamos a la secretaría académica y acompañamos el proceso de denuncia. Queremos que quien denuncia sienta nuestro respaldo”.
°Alejandra Granados, del CF de Letras y Ciencias Humanas, añade: “Brindamos apoyo para hacer válida la denuncia e informamos a otras instancias, como la Defensoría Universitaria. También tenemos un portal de denuncias en la página de Facebook del CF”.
°Diego Flores, secretario de defensa del CF de EE.GG. Letras, precisa: “He conocido tres casos y he canalizado estas denuncias a las autoridades. Los alumnos deben saber que las redes sociales, como el Grupo PUCP 2.0, no son el lugar más adecuado para denunciar o visibilizar estas prácticas. Para eso está la comisión contra el acoso y el hostigamiento”.
9. Dos acosadores en una universidad chilena
°En los últimos dos años la Universidad de Santiago de Chile (USACH) se ha visto envuelta en una controversia pública a raíz de las denuncias por acoso y hostigamiento sexual contra Luis Ortega y Arturo Samaniego, profesores del Departamento de Historia. Ambos han sido señalados por al menos diez alumnas como los autores de comentarios sexistas sobre su cuerpo, apariencia física o vestimenta en el aula.
°Según las estudiantes, los docentes las citaban en sus oficinas para entrevistas a puerta cerrada o les pedían visitarlos en sus domicilios. En una declaración pública, las denunciantes recordaron que cuando ingresaron a la USACH les advirtieron “tener cuidado” con ambos profesores. Sus conductas eran conocidas pero estaban naturalizadas por sus propios colegas que las atribuían a su edad; habían sido criados o formados en otro contexto, con valores distintos.
°Las denuncias siguen en proceso de investigación y los acusados continúan dictando clases. Frente a la inacción de las autoridades, el Centro de Estudiantes de Historia de la USACH ha lanzado una campaña titulada: “No te calles #NiSeasComplice”.
10. Machismo a la mexicana
°Cuatro de diez mujeres -alumnas, docentes o administrativas- de la Universidad Autónoma de México (UNAM) reconocen haber sido objeto de acoso y hostigamiento sexual, según una investigación del Programa de Estudios de Género de dicho centro de enseñanza superior. Las mujeres revelaron que reciben constantemente insinuaciones y propuestas sexuales y que su rechazo ha provocado desde bromas machistas hasta amenazas y represalias.
°Un crimen dentro del campus de la UNAM. En mayo último la comunidad universitaria quedó conmocionada luego de la muerte, dentro del campus de la UNAM, de la estudiante Lesvy Osorio. Según las imágenes captadas por una cámara de seguridad, momentos antes de ser hallada sin vida en una cabina telefónica, la joven recibió una brutal golpiza de su enamorado, Jorge Luis González. Este actualmente está preso por homicidio simple. A raíz de este caso las autoridades de la UNAM han iniciado una campaña de sensibilización para motivar a los estudiantes a denunciar cualquier práctica violenta, discriminatoria o machista dentro de la universidad.