Fans, Idols y música: experiencias K-Pop en pandemia

El fenómeno de la música coreana continúa en auge desde hace más de una década en el mundo. Aquí, como ocurre en otros países, los fanáticos del K-pop se organizan formando fanclubs y comunidades con la finalidad de apoyar a sus artistas preferidos, propiciar que ellos puedan venir al país y conocerlos. Sin embargo, la pandemia limitó la interacción de sus seguidores y los distanció aún más de sus Idols. Fanáticos de cuatro de las bandas más populares, BTS, BLACKPINK, Super Junior y Girls’ Generation, cuentan sus experiencias camino al levantamiento de las restricciones del Covid-19. Asimismo, dos comunicadoras audiovisuales y una periodista coleccionista explican la interacción y sentido de estos grupos.

Por: Aeylin Ocampo y Mariana Sánchez
Portada: Aeylin Ocampo


El K-pop o ‘pop coreano’ es un fenómeno musical que ha crecido exponencialmente en los últimos diez años y ha tenido una gran acogida en Latinoamérica. Este se popularizó tras la exportación de productos de entretenimiento coreanos, como telenovelas o doramas, música, cine y videojuegos. Según las estadísticas de Spotify, el ascenso global del K-Pop es evidente: desde el 2014 hasta enero de 2020, las reproducciones de este género aumentaron en más del 1800%. 

Desde su llegada al Perú, el K-Pop se ha consolidado como una de las preferencias de los jóvenes. Bandas como JYJ, U-Kiss, Big Bang y Super Junior, fueron algunas de las que han pisado suelo peruano. Sin embargo, el país aún espera la llegada de una nueva generación de grupos como BTS, Black Pink, Exo y Twice, que fueron creadas a partir de 2015, fecha que coincide con el gran salto de popularidad del movimiento surcoreano.

Todas estas bandas de K-Pop tienen una comunidad de fanáticos o fanclubs que va creciendo conforme pasa el tiempo. Muchas de estas convergen en Lima. Los sitios predilectos para las reuniones prepandémicas eran el Centro Cultural Arenales o el Campo de Marte. A estos dos puntos de reuniones se une el denominado Boulevard K-pop, ubicado entre el Parque de la Exposición y el ya mencionado Campo de Marte, lugar frecuentemente concurrido desde el levantamiento de las restricciones por el Covid-19 en 2021. 

Al igual que en otros rubros, con la llegada del Covid-19 a nuestro país, las actividades de los fandoms o ‘conjunto de aficionados’ de cuatro de las bandas de K-Pop más populares en el país —BTS, Black Pink, Super Junior y Girls’ Generation— quedaron paralizadas. Eventos de interacción y proyectos sociales no llegaron a concretarse. 

Super Junior, una mirada de logros y dificultades 

Super Junior es una banda surcoreana que debutó en el mundo del K-Pop en 2005 con unos 17 miembros, de los cuales solo quedan nueve. Este grupo es uno de los más importantes en toda la industria del K-Pop por su trayectoria de 16 años y por el reconocimiento mundial que recibieron como los “Reyes del K-Pop” entre 2011 y 2013. Han pasado por performances en géneros que van desde las baladas hasta el hip hop

La banda visitó Perú en dos oportunidades. La primera vez, en 2013, su gira tenía como nombre “Super show 5”; la segunda vez, en 2018, el de “Super Show 7”. Su club de fans se llama ELFS, que significa Everlasting friends

Super Junior en un concierto online durante el año de la pandemia, el más visto de toda la agencia SM en Beyond Live. Foto: SM Entertainment.

Una de las mayores dificultades, tanto para la banda como para el fandom, radicó en sobrellevar la pandemia. Paola Ortiz, una de las representantes del club de fans ‘Super Junior Latinoamérica’ cuenta que fue una situación catastrófica. “Teníamos planeado hablar con la embajada de Corea del Sur para oficializar el fanclub, hacer eventos sociales para que nos reconocieran, pero por la pandemia se retrasó todo y los eventos se acabaron”.

Los fanáticos de Super Junior solían reunirse para celebrar los cumpleaños de los miembros de la banda, hacer eventos sociales y practicar coreografías de K-Pop; sin embargo, aunque intentaran reunirse ahora, sería como iniciar de cero. “Hay personas que entran y salen del club ante el debut de una banda nueva”, señala entristecida. Incluso las dificultades en cuanto a la organización de reuniones y conversatorios quedaron frustradas en medio de la crisis sanitaria. 

Otro de los problemas fue la administración de las redes sociales, en las que el fandom iba creciendo. Hace unos meses, la presidenta renunció al cargo y en su lugar dejó a alguien que no ha administrado bien la página de Facebook. “Intentaron hacer un evento por el cumpleaños de Donghae (miembro del grupo). Debíamos reservar un restaurante y algunas chicas estaban indecisas o tenían miedo a contagiarse y no llegó a concretarse”, narra Paola. 

“Este año donamos ropa y comida a ONGs a nombre de Super Junior. También realizamos actividades para los miembros del fanclub, recolectamos dinero y compramos víveres para armar una canasta por el cumpleaños de alguno de los chicos”, detalla la representante del club de fans respecto a los proyectos sociales que realizan actualmente. 

Respecto a la banda, algunos de sus planes musicales también quedaron relegados. Tenían programadas giras internacionales en Latinoamérica para 2020 y tuvieron que cancelarlas. “Hay planes para una posible gira durante el 2022, pero la incertidumbre por el Covid-19 los lleva a no afirmar nada. Sin embargo, ellos están expuestos al contagio porque continúan realizando producciones, obras de teatro o series de televisión en otros países”, señala Paola. 

Las responsabilidades de la virtualidad en Girls’ Generation

Girls’ Generation, también llamada SNSD, es un grupo de chicas que conforman la generación “Old school”. Junto a Super Junior se posicionaron en el top de nuevas canciones durante la ola del K-Pop en 2011. Ellas debutaron en el año 2007 logrando reacciones positivas en todo Asia. La banda actualmente cuenta con ocho miembros y están en “hiatus”, periodo de descanso de sus actividades artísticas. 

Tras el inicio de la pandemia, el fandom de este grupo vivió situaciones complicadas. “Con la pandemia nos alejamos bastante. El anteaño pasado hicimos solo una reunión de Zoom por el aniversario y sorteamos pósters. Ahora resulta más difícil seguir las actividades de las integrantes, ya que cada una trabaja individualmente. Ello implica publicar información de ocho o nueve personas por separado”, explica Fiorella Mucha, administradora de la página oficial de fans de Girls’ Generation Perú, activa hace 12 años. Ella es fan de la banda desde el 2009 y llegó a ser parte del fanclub un año después.

Para Fiorella, las responsabilidades y el tiempo también son un factor que dificulta la administración del fandom. “Administramos el fanpage de manera virtual, pero buscamos nuevas personas que actualicen la página, porque a veces no estamos al corriente de las actividades de las chicas. Ya todos somos adultos y tenemos más responsabilidades y menos tiempo para dedicarle a nuestro grupo favorito”, manifiesta. 

Pese a ello, algunos proyectos del fanclub han resultado muy provechosos hacia la comunidad. “Durante el año soñamos con hacer nuestro proyecto social anual. En 2021 hicimos uno a favor del medio ambiente: donamos árboles con el nombre de nuestras miembros a la Amazonía. El año pasado regalamos packs de aseo a las enfermeras del Hospital Dos de Mayo. Tratamos siempre de unirnos y participar en actividades del fanclub con los nombres de nuestras chicas”, cuenta la fanática de Girls’ Generation. 

Girls’ Generation durante un concierto en el 2017. FOTO: SM Entertainment.

Cuando el fandom hacía reuniones físicas antes de la pandemia, organizaban eventos, hacían proyecciones en el cine de películas en las que había actuado algún miembro y  planificaban salidas al Campo de Marte. Incluso tenían en mente proyectos internacionales, como el contacto con el fanbase coreano (el conjunto de fans más importante) o el asiático.

Algunos planes a futuro están gestándose en el Fanclub SNDS. “Pensamos tener una reunión física, luego de todo este tiempo distantes. Queremos alquilar una sala de cine para ver una película en la que actúe una miembro. También hemos planeado hacer un reencuentro junto a los chicos vacunados, todo con las medidas preventivas para cuidarnos”, detalla Fiorella.

El factor tiempo y adultez

Super Junior y Girls’ Generation son llamados por muchos fans generación Old school. Y es que 15 o 16 años de trayectoria no tiene cualquier grupo. Por ello, ambas administradoras señalan que una dificultad por la que no siempre pueden estar pendientes de las actividades del grupo y sus seguidores son sus responsabilidades de adulto, como trabajar y estudiar. 

Para Fiorella, el cambio radica en que uno como fan aprende a valorar al grupo sin tener que depender de este. “En mi fanclub, la mayoría tiene entre 28 y 30 años y seguimos el K-Pop desde hace más de 11 años. Éramos adolescentes y nos podíamos amanecer viendo videos y conectándonos a la computadora a esperar a las 2 o 3 am el estreno del MV (video musical). Ya cuando fuimos madurando nos dimos cuenta de que podíamos apoyar al grupo sin consumir nuestro tiempo y sin perder nuestra vida personalSomos conscientes de que no podemos girar en torno a un grupo. Las queremos, las amamos y las apoyamos, pero no debemos hacer de eso nuestro mundo”, subraya.

De la misma manera, Paola resalta que la edad y las responsabilidades, inevitablemente, hacen que se alejen de las bandas de K-Pop. “Conozco fans de Guadalajara de 36 o 39 años de edad, ya tienen familia, trabajan, así que ya no pueden seguir a sus grupos favoritos como antes”, agrega.  

El factor tiempo y adultez genera un contraste marcado entre algunos seguidores de las bandas Old school, como Super Junior y Girls’ Generation, con relación a las bandas de la nueva generación como BTS y Black Pink.   

BTS, música que inspira grupos leales y organizados

BTS es la banda coreana más popular del mundo compuesta por siete integrantes varones. Debutó en 2013 bajo la gestión de la compañía Big Hit Music, agencia que por esos días era poco exitosa en la industria musical. La banda ha ubicado cuatro de sus discos en el puesto número uno de ventas en EE.UU. y su último hit, Butter, obtuvo cinco Récords Guinness tras alcanzar los 100 millones de vistas en YouTube en 24 horas. 

Después de más de dos años de confinamiento, Amy Acosta, representante de ‘BTS Perú’, el primer y más grande fanclub peruano dedicado a BTS desde el 2013, cuenta que hace dos meses los fans tuvieron su “primer evento presencial: la proyección de un concierto”. 

Imagen de presentación del fanclub BTS Perú. Foto: Facebook.

Tras la llegada de la pandemia se vieron obligadas a paralizar actividades grupales de interacción, por lo que retomar la realización de este tipo de eventos es emocionante para el grupo. “Hacíamos eventos en cafés o reuniones por los cumpleaños de los miembros de la banda, pero todo se detuvo”, detalla. 

Mantener la interacción entre las seguidoras de la banda no fue sencillo teniendo en cuenta las amenazas del virus y la incertidumbre vivida. Las redes sociales de ‘BTS Perú’ se convirtieron en el medio indicado para mantener viva la pasión por la banda coreana. Amy señala que se logró incrementar el número de seguidores e, incluso, la interacción en los comentarios de las publicaciones. 

‘BTS Perú’ cuenta con 526 mil seguidores en su página de Facebook. Amy explica que, oficialmente, el fandom lo componen alrededor de 20 personas y el equipo que dirige al grupo está conformado por tres integrantes fans de BTS. “Jessica se encarga de crear proyectos sociales, buscar los contactos de diferentes organizaciones y preguntar si se puede trabajar en conjunto para hacer la recaudación de fondos necesarios; Jennifer, de los eventos presenciales; y yo, de las redes sociales, Instagram, Facebook y Twitter”, señala la estudiante de Comunicación Audiovisual.

Según Antonella Bertocchi, la lealtad y la organización son las características principales de un seguidor o seguidora de BTS. “El modelo de fan de BTS es uno que muchos artistas desearían tener. El nivel de organización y lealtad indica el fenómeno cultural y musical en el que se ha convertido BTS”, sostiene. 

Para las comunicadoras audiovisuales, BTS utiliza una estética bastante coherente a lo largo de todos sus videoclips, lo que les permite obtener un alto número de reproducciones no en una sola canción, sino en todas las que componen un álbum musical. “Toda su videografía tiene extrema referencialidad a videos anteriores, por lo que no puedes dejar de verlos”, señalan.

La organización de la fanaticada se refleja en los proyectos sociales organizados por ‘BTS Perú’ antes y durante la pandemia. “Cada vez que llega el cumpleaños de un miembro, se realizan aproximadamente tres o cuatro proyectos de carácter social. Puede ser el donar sangre para pacientes con cáncer, donar ropa, juguetes o comida, etc.”, explica Amy.

Uno de los eventos presenciales con más repercusión a inicios de diciembre fue la celebración del cumpleaños de Jin, miembro de BTS, en el Circuito Mágico de las Aguas. “Un grupo de cinco chicas, seguidoras de Jin, organizó una proyección led en una de las piletas del parque. Muchas personas de distintas edades asistieron. Fue un evento emocionante y uno de los más grandes en Perú. Incluso fue una noticia en Corea del Sur”, cuenta Amy con emoción.

BLINKS en el Perú y el mundo

Black Pink es una de las bandas coreanas femeninas más populares del mundo. Tras 14 días de su debut, en 2016, lograron el primer lugar en la Lista Mundial de Canciones Digitales con su canción Whistle

La banda está compuesta por cuatro chicas de distintas nacionalidades: JiSoo, coreana, Rose, neozelandesa que vivió en Australia, Lisa, tailandesa, y Jenie, coreana que habitó en Nueva Zelanda. “Cada grupo tiene su propia cultura y eso los hace únicos, pero la combinación es lo que hace que Black Pink destaque”, afirma el productor y compositor de la banda, Teddy Park, en el documental que realizó Netflix sobre la historia de Black Pink.

Bibiana Salazar, estudiante de Comunicación para el Desarrollo de la PUCP, es fan de Black Pink a raíz de la pandemia. “Descubrí su música en 2020, cuando sacaron la canción How You Like That. Al instante, me gustó mucho el estilo que tenían tanto en lo visual como en lo musical. No pensaba que me volvería fan, pero comencé a ver todos sus videos en YouTube y su música me hacía sentir poderosa. Los ritmos y la letra (cuando veía las traducciones) me permitían verme de otra manera”, narra.

Según las hermanas Bertocchi, las bandas de K-pop generan un alto grado de intensidad emocional, lo que explica el éxito del arte surcoreano. Para Sofía Pichihua, periodista digital y docente de comunicaciones, la admiración hacia un artista o Idol se basa en la credibilidad de su imagen. “Casi siempre, todos los miembros del grupo tienen una excelente reputación y eso te conduce a admirarlos. Así, lo que te motiva a seguirlos no es necesariamente el talento musical, sino la persona detrás de esa ‘cara bonita’, voz melodiosa, etc.”, sostiene. 

‘Black Pink Perú’ es el primer fanclub oficial en el país, creado con el fin de apoyar y difundir al grupo. Interactúan constantemente con sus 67 725 seguidores a través de sus redes sociales. Comparten fotos de las artistas y generan proyectos sociales en representación de la banda, lo cual implica la venta de souvenirs mediante los que se recaudan fondos monetarios entre los seguidores. 

Hace una semana, lograron que una de las integrantes de la banda, Lisa, saludara a los fans peruanos mediante un video, lo cual fue un gran logro para la agrupación y generó comentarios positivos. 

La también coleccionista de figuras asiáticas, Pichihua, distingue entre la admiración que los fans puedan sentir por los artistas que siguen y la ideologización de los mismos. “Un o una fan reconoce que eventualmente estas personas no son perfectas y podrían equivocarse en algún momento, pero eso no quiere decir que dañe del todo la reputación de quienes admiran”, señala. 

El sueño de toda fan: conocer a su Idol

Para todo fanático de artistas extranjeros uno de sus mayores anhelos es conocer a la banda o cantante personalmente. Lamentablemente, la pandemia volvió casi imposible esta posibilidad para los fans del K-Pop. 

“He podido leer comentarios, en el caso de las fans de BTS, en el que dicen que su sueño más grande es conocer a la banda y, para eso, sabían que necesitaban viajar a Corea. En pandemia, eso es imposible, incluso si hay conciertos allá”, explica Pichihua. 

Otra de las barreras para los seguidores del K-Pop es el idioma de los artistas. Según Amy, la representante de ‘BTS Perú’, el hecho de que las canciones sean coreanas no resulta del todo un obstáculo para entenderlas, pero esto sí lo es en el caso de entrevistas o transmisiones en vivo que realizan los artistas a través de sus redes sociales. 

Pichihua sostiene que estas barreras logran ser superadas por las mismas comunidades de fans, debido a que crean alternativas de solución que les permitan acercar a los fans a sus ídolos. “Si no pueden verlos presencialmente, organizan chats grupales por medio de los que contactarse con ellos o al menos sentirse cerca de éstos; para el tema del idioma, traducen el material necesario para que sea comprensible”, explica.